Tú siempre me has enseñado a ser fuerte, y eso lo he admirado profundamente. Creía en mi fuerza porque veía a alguien luchando conmigo , creí en tu fuerza porque me la demostraste. Nadie me ha enseñado tanto como me has enseñado tú. Quiero que sepas, que pase lo que pase, te voy a llevar aquí adentro. Pase lo que pase, tú seguirás siendo mi fuerza interior, mi fortaleza, mis ganas de luchar.
Siempre seguirás siendo mi shinigami.