
¿Recuerdas cuando dije que esperaras hasta que la primavera hiciera acto de presencia y las golondrinas volvieran de su larga emigración? Hoy he mirado al cielo y las he visto, las he visto volar con la suave temperatura de esta estación. Por un momento he sentido que con su vuelo habían dejado caer una libertad para mí. Las flores de cerezo se hacen visibles ya... y su perfume me arrebata pequeños y delatadores suspiros.
Supongo que como cualquier ave novata, me da miedo volar... Dejaré crecer un poco más mis alas para asegurarme de volar esta vez, muy alto...